Las disfunciones sexuales son un problema muy común entre la población, tanto en hombres como en mujeres, independientemente de la edad. Sin embargo, hoy en día sigue existiendo un tabú en torno a la sexualidad, más aún cuando hablamos de disfunciones. Por ello, muchas personas que sufren dichos problemas son reticentes a acudir a terapia sexual.
Acudir a un sexólogo es un paso difícil de dar, pero contamos con que la terapia sexual es de las más eficaces que existe actualmente, viéndose resultados en pocas semanas. Dichos resultados son una motivación muy importante para continuar la terapia sexual, ya que la sexualidad forma parte de nuestra naturaleza desde que nacemos hasta que morimos y una vida sexual sana es una fuente de beneficios.
Es por ello que debemos cuidarla y prestarle atención.
El primer paso a seguir en terapia sexual siempre es descartar los problemas médicos. Aunque se ha comprobado el impacto de diferentes enfermedades y su influencia en la sexualidad, la mayor parte de las dificultades sexuales tienen un origen psicológico. A pesar de ello, es importante que se descarte cualquier tipo de afección médica para asegurar un buen tratamiento psicológico.
A continuación, se realizará una historia clínica sobre la dificultad. Sea cual sea el diagnóstico, existe una clasificación general para las disfunciones.
¿Cómo se clasifican las disfunciones sexuales en la Terapia Sexual?
- Primaria: el problema siempre ha estado presente.
- Secundaria: su aparición coincide con un hecho concreto.
- Global: ocurre en cualquier circunstancia.
- Específica: en situaciones específicas.
Cualquier tipo de tratamiento o clasificación debe realizarse bajo la supervisión de un especialista en terapia sexual para asegurar la correcta evolución del paciente.
¿Necesitas más información? ¿No sabes si tu problema necesita de la ayuda de un Sexólogo o Psicólogo de Pareja? Ponte en contacto con nosotros, estaremos encantados de resolver todas tus dudas.